Limpiar afuera para fluir por dentro

Para la medicina china., la energía se encuentra siempre en movimiento y equilibrio. Si nuestros cuerpos no cuentan con el balance energético correcto, todo se desordena. Este equilibrio se llama homeóstasis y es una propiedad de los organismos que consiste en mantener una armonía dinámica entro lo interno y lo externo. Un ejemplo de esto es la temperatura que experimenta nuestro cuerpo con el cambio de las estaciones, ya que obligan al cuerpo a modificar como la percibimos para mantener un equilibrio. De esta misma manera todo lo que experimentamos con nuestros sentidos tiene una repercusión interna, por lo que la forma en que mantenemos el espacio que habitamos, influye completamente en nuestro estado de ánimo y nuestra paz mental.

Un desequilibrio de energía en nuestro cuerpo producirá estancamientos y finalmente enfermedad, de igual forma un desequilibrio en la energía donde estamos gran parte de nuestro día va a ser sinónimo de estancamiento y la energía dejará de fluir. Esto repercute directamente en los sucesos qué acontecen en nuestro día a día y en la capacidad de enfrentarlos de tal o cual manera, que en el tiempo se traduce a mala toma de decisiones, frustraciones de las cuáles no podemos salir, problemas a los cuales no vemos solución y un sinfín de consecuencias, producto del estrés en el que estamos inmersos en nuestro entorno directo, ya sea nuestra oficina, casa, dormitorio o cualquier lugar en el que pasamos tiempos de estancia largos, ¿Les ha pasado?. Si les suena familiar, les cuento que todos hemos sido iniciadores de este tipo de problemas en como habitamos nuestro espacio, como lo mantenemos, cuanto lo cuidamos realmente y por último, ¿qué hacemos para cambiar esta situación? Una experiencia muy cercana ha sido la mía y no sólo una vez, sino que se ha repetido a lo largo del tiempo. Los cambios de temporada me estresan, el hecho de tener que sacar mi ropa de verano y guardar la de invierno (porque no tengo mucho espacio en mi closet), hacen que cada seis meses tenga al menos 1 semana de caos total en mi dormitorio, y me sucede que no me dan ganas ni de entrar, como la mayoría de las personas dispersas, alargo este proceso mucho mas tiempo del que debería, ya sea por tiempo o flojera, y noto en mi casi inmediatamente un cambio de ánimo y energía, me cuesta fluir, como si me empezara a confundir y a molestar mucho mas rápido de lo habitual, y ¡claro!, finalmente mantenerme en desorden hace que pierda mi lugar de paz, sobre todo en el espacio mas importante de mi departamento que es donde debo reponerme y recargar energías, así que una vez empiezo no paro, y la verdad me sirve tanto, lo hice hace unos días y por eso se los comento ahora, me ayudó a aclarar mis ideas, a purgar…

La energía de nuestro interior debe fluir para poder conectar con nosotros, pero una gran ayuda que nos podemos entregar, es comenzar a fluir desde lo general a lo particular, comenzar con lo macro, con lo que nos rodea, darnos un lugar por pequeño que sea, que esté ordenado, decorado con el estilo que nos guste y nos haga sentir bien, que genere una vibración que nos acomode para que nos ayude a fluir con mayor facilidad.

Este es mi mensaje el día de hoy, ayudarnos en nuestro camino a conocernos, puede comenzar con algo simple, un primer paso, quizás botar ese peluche viejo que no nos gusta y guardamos solo por sentimentalismo, quizás pintar nuestra pared de un color que nos haga sentir felices y relajados, o tal vez ordenar ese espacio que hace tanto tiempo sabemos que debemos organizar…

Demos este pequeño gran paso hoy, y ayudémonos a ir desde lo más simple cambiando y abriendo paso a esa conexión interior que tanto buscamos.

Descubre el poder de tus energías