Tu cuerpo te habla

Cuando hablamos de poder conectarnos con nuestra esencia y con auto descubrirnos, nos referimos también a poder entender las señales que nos envía nuestro cuerpo, a escuchar lo que nos quiere decir y a mirar lo que nos quiere mostrar.
Nuestro cuerpo, nos habla constantemente, manifestándose de múltiples formas (alergias, tos, infecciones, parálisis, entre otros síntomas), pero muchas veces sin darnos cuenta, no escuchamos lo que nos quiere decir, por ende, la opción que le queda es manifestarse a través del dolor y la

enfermedad. Hoy en día, el ritmo y la rutina de nuestra vida diaria ha generado que nos desconectemos de lo que sentimos, dejamos de entender por qué nos ocurren ciertas cosas y así vamos perdiendo la habilidad de advertir lo que realmente nos está pasando. Es por eso, que cuando aparece el dolor físico y la enfermedad es importante lograr entender qué es lo que nos quiere decir, ya que de esta manera podremos llegar al camino de la cura y el bienestar.
La enfermedad es el medio por el cual nuestro cuerpo nos habla y nos dice que algo no funciona bien, exigiéndonos que algo debe cambiar. De hecho, nos obliga a cambiar el ritmo de nuestra vida y nos impide seguir al mismo paso que llevábamos hasta ese momento, imponiéndonos una toma de consciencia y por ende un cambio radical en cómo llevamos nuestra vida. Y es aquí donde reside nuestro gran problema, no somos conscientes de lo que sentimos, ya que cuando enfermamos el cuerpo nos quiere decir algo de nosotros mismos y lo callamos muchas veces a través de remedios, pero la enfermedad sigue ahí. En mi caso particular, constantemente produzco alergias, así que en mi vida es algo normal, pero he entendido que muchas de ellas, se deben a problemas emocionales que he querido callar o no mirar, por múltiples razones.  ¿Es algo normal que suceda esto? Si, es algo muy normal, pero que debemos hacernos cargo de él para sanar de verdad. El malestar no aparece de un día para otro, es un proceso que lleva un tiempo manifestándose y que luego de no ser escuchado y cuestionado se transforma en enfermedad.
El cuerpo siempre nos habla. Cada sensación, molestia, dolor o proceso enfermizo nos pide un cambio o al menos, que tomemos conciencia de todo aquello que daña nuestro bienestar y, por tanto, nuestra salud.
Nuestra invitación es que vayamos más allá y aprendamos a ver más allá de lo evidente. 

“La enfermedad es una forma de búsqueda externa, la salud es paz interior” 



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